jueves, noviembre 3

Haz que el sueño dure para siempre




Lo hace. Él mueve montañas. No hay nada imposible, nada que no este a su alcance.
En nuestra historia de dos, tu y yo, mejor que nadie, sabemos que eso es verdad. En nuestro caso, no se queda en una simple frase dicha. Hacemos realidad lo escrito. Sino, mira hacia atras. Todo lo dicho, hecho está,todo lo que un día juramos dar. Para ser sincera, nunca apartamos la realidad de nuestro sueño. Un sueño. Sí. Hasta aquel entonces eso era, eso fue.
Tú, eras tú. Yo, era yo. Y un treinta y uno de mayo logró juntar todo, en un nosotros. Igualó un sentimiento de dos seres distintos.

Voy dando pasos por mi mente, que me hacen recordar, enfados olvidados por sonrisas que levantan el autoestima, opiniones que no nos hacen perder el rumbo. Hay quienes lo comprenden, nos comprenden, hay quienes no, pero cuando hay un sentimiento de por medio, se deja de lado la opinión de cualquier persona ajena a los dos. Así lo hicimos. Decidimos cuidar el tesoro (para mi no es otra cosa que eso, un tesoro), quedarnos juntos en esta "guerra" y pasar fronteras, mirando a los demás como simples personas a nuestro alrededor. Sin miedo, estamos juntos.

Y... como decirte. Tu sabor, está en mis labios. Tu mirada en mis ojos. Tu tacto en mi piel. Tu voz en mis oidos. Tu olor en mi olfato. Tu recuerdo en mi mente. Y...¿tú? ¿Sabés? Desde hace tiempo estás en mi.

Nos gusto el verano.  Todavía recuerdo como roze el cielo, besándote, con todo el aire moviendo mi pelo, tu pelo, y ni siquiera sentí frio. Pero, ahora ¿qué de malo tiene el invierno? No hay calor,  por el contrario, hay frío, mucho frío. ¿Qué de malo tiene si estás ahí para cuando no hay abrigo abrazarme?
Me conformo con uno de esos días de lluvia, bajo un techo que nos arrope,no hace falta conversación, tu puedes hacer lineas en mi espalda, de arriba a abajo, de izquierda a derecha, que yo mientrás tanto estaré tumbada en el sofa de tu cuerpo. Estando a tu lado, no me hace falta que nada sea perfecto. Al fin y al cabo, ¿para que quiero que algo sea perfecto cuando la perfección ya la marcas tú?


 Hasta ahora no he tenido mejor compañía que la tuya, por eso no pretendo ser tu vida, me conformo con estar metida en ella.



¿Pedir? Por pedir, te elegiría a tí. Pero, me conformo con que no permitas que acabe esto, este momento. Porque sencillamente, es perfecto.