Envidia ambiental.

Que si, que somos unas putas, que se nos ha subido a la cabeza, que nos gusta vacilar, ¿algo más? Como jode la envidia. ¿Por mi parte? Venga ya, no soy yo esa que os mira cuando pasáis hasta que torcéis la esquina y una vez que lo habéis hecho no paro de hablar de vosotras. Mi madurez,da para hacer algo mejor que eso.
Tranquilidad que vosotras NO os copiáis, no,no, es solo pura coincidencia, pero después cuando vuelva a pasar con algo vistoso, nuevo quizás para vosotras volveréis a mirar y recaeréis en la crítica. Crítica que no me ofende, ¡para nada! Esa que dejo pasar sin importarme lo más mínimo, no nací pasota, vosotras me habéis ayudado a serlo. De nuevo ¡gracias,eh! Pero, que coño. Ni siquiera las merecéis. Es más, mi forma de ser ayuda a que niñatas como vosotras os deis cuenta lo insignificantes que podéis llegar a ser para gente que tiene un poco más de conocimiento. Hablo de gente que sabe vivir su vida sin hacer daño a la de los demás. Pero vosotras... bah, ya sabéis como sois. Y de nuevo hablo de vosotras,vosotras, vosotras. Criticáis.Miráis.Insultáis. Tenéis un defecto, poco tiempo después hacéis lo que habéis criticado,mirado e insultado por el simple hecho de la envidia, si, esa que lleváis siempre dentro, la que os colocáis de abrigo cada vez que salís de casa como una cosa rutinaria, que no puede faltar. Lo bueno de todo esto es que, yo se colocarme otros tipos de prendas, que al lado de las vuestras podríamos decir que son de marca. Indiferencia.Pasotismo. Estás, mis favoritas. Esas que llevo siempre. Sea el día que sea. Mañana,tarde o noche. Da igual, siempre van conmigo.

Bueno, ahora vayamos a otra cosa. La primera que se me venga a la cabeza. Una palabra. Simple. Compleja, a su vez. AMISTAD. Cuatro años atrás, la odie. Con la que hasta hace poco no he conseguido llevarme bien. Pero de pronto, llegaron ellas. Y cuando hablo de ellas no es de vosotras. Porque si lo hiciera debería decir que la amistad no consta de dar un simple cigarro, ni invitar a un puto cubata que te alegre la noche. No. Ellas, si de nuevo ellas, me han enseñado que la AMISTAD tiene un gran cargo que solo pocas personas saben llevar a cabo. Solo aquellas que tienen fuerza para poder con él. Pero ellas son mi ejemplo a seguir. Han podido , a veces es duro, pero siempre siguen el camino con él a cuesta. Como no, yo también ayudo. Aunque me sude la espalda y mi columna se curve hasta no poder más, nunca lo soltaré.